Objetivo 2025: Descarbonización   

En Andreu World hemos querido anticipar cinco años los objetivos de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible. Lo hemos llamado: Objetivo 2025 y con él hemos dado un paso definitivo para entrar en economía circular. Contamos con las certificaciones internacionales más exigentes que garantizan que todos los productos que fabricamos son saludables tanto para las personas como para el entorno, desde el primer boceto y la manufactura hasta su reciclado o reutilización al final de su vida. De la cuna a la cuna. 

Hemos sido los primeros de nuestra industria en alcanzar la huella de carbono neutra. El promedio de huella de carbono que genera la fabricación de cualquier silla de las que se encuentran actualmente en el mercado oscila en torno a 60 kg CO2e. La de nuestros productos está muy por debajo, como se puede ver en los ejemplos anteriores. Partimos con ventaja porque la madera como material, en su vida útil y posterior reciclado, tiene una huella de carbono de 0 kg CO2e. Es neutra por naturaleza.

Atenuar el cambio climático para evitar sus consecuencias solo es posible mediante una descarbonización progresiva, relevante y voluntaria. El dióxido de carbono deja una huella en el planeta que estamos obligados a cuantificar individualmente. Tomar medidas para reducir y compensar las emisiones de CO2 que se generan en cada una de las fases del ciclo de vida de un producto, comenzando por la extracción de la materia prima, se ha convertido en una parte esencial de nuestra planificación estratégica. Dentro de la batería de acciones que hemos emprendido para ser también líderes en sostenibilidad, ha sido una prioridad reducir nuestra huella de carbono hasta llegar a ser los primeros de nuestra industria en neutralizarla.

Todos los expertos coinciden en que el dióxido de carbono es el principal causante del cambio climático y es necesario reducir rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero para estabilizarlo. Europa está a la cabeza en cuanto a esfuerzos y espera ser el primer continente climáticamente neutro en 2050. Para lograrlo, sus gobiernos acabarán tomando medidas de carácter normativo y económico.